jueves, 4 de abril de 2013

PRIMA INTER PARES


Podríamos decir que nuestra Infanta YA es “primera entre sus iguales o prima inter pares”, por pleno derecho y no debido al cargo que disfruta (y mucho) su padre.
Primus inter pares ó el primero entre sus iguales, así más o menos se consideran los reyes así mismos desde la época del Emperador en Roma
Bueno, pues Cristina Federica Victoria Antonia de la Santisima Trinidad de Borbón y Grecia, lo ha conseguido poniendo tanto esmero que a pesar de las dudas al final ha resultado imputada (aunque no como cualquier hijo de vecino) por el caso Noós.
Cualquier hijo, hija en este caso, de vecino no tendría un marido que en su retiro deportivo  decide poner una empresita con unos socios en la que su mujer y suegro ponen las relaciones y él pone la cara (dura) y algún que otro informe escaso de contenido cobrado a miles de euros, mientras se encarga de recaudar millones de euros que empleará en beneficio propio con total impunidad ya que nadie se atreve a pisarle los callos precisamente por ser su esposa y su suegro quienes son.

Esta monarquía tan costosa de mantener y tan querida en anteriores épocas como representante y embajadora de negocios y pueblo español, está pasando sus horas más tenebrosas y no por obra y gracia de la crisis económica y de las instituciones….más bien por sus propios méritos.
En épocas no lejanas nuestra monarquía era señalada como espejo en el que se miraban las monarquías europeas, pongamos algún ejemplo:
·        Ejemplo de austeridad. La revista Hola gusta de señalar los modelitos de la familia real reutilizados en algún sarao, como prueba de poco derroche. Y aunque muchos defienden que esta/nuestra monarquía sale más barata que otras que ya quisieran…nadie a día de hoy ha sido capaz de recopilar en un simple Excel los ingresos y emolumentos directos e indirectos que perciben los integrantes de la familia real.
·        Exaltación de valores patrios allá donde sus compromisos les llevaran. Que si utilizan marcas españolas, que si son asiduos de la dieta mediterranea, que si la tradición española, bla, bla, bla…Da grima ver a Elena con tanto abalorio con la banderita de España cubriendo cuerpo, pelo e hijos en eventos deportivos. 
·        Los mejores representantes de España.  En su apretada agenda acompañando a empresarios y misiones económicas, el rey ha actuado como introductor en los selectos círculos internacionales de los posibles negocios patrios. Servicios reales de los que ahora se empieza a cuestionar si fueron gratis o tuvieron peaje…vamos el famoso: uno para ti y dos para mí que para eso soy el que pone la jeta.
·        Estampa familiar ejemplar. Brindando imágenes de vacaciones familiares y regatas en veleros idílicas, con toda la familia reunida en torno a los sucesivos yates Fortuna, que también ¡¡ vaya tela con el nombrecito del barco!! .

Y por aquí precisamente es por donde se le ha caído todo el “tinglao” a Juan Carlos, que hasta ahora se lo había montado de manera espectacular con su imagen de hombre campechano:
La caída de esta estampa de familia ejemplar y como manda el catecismo, aquejada como la de todo el mundo por sus divorcios e infidelidades  ha propiciado que empecemos a preguntarnos por los ingresos del rey y el príncipe, por los empleos de las infantas y por las cuentas en Suiza del Rey que proceden al parecer de la herencia de su padre que a su vez no sabemos de donde proceden.
Que nos preguntemos por las cacerías en solitario o en compañía de amigas entrañables que a su vez actúan de facilitadoras de no se sabe qué negocios públicos y privados.
Que nos cuestionemos los empleos de los maridos de las infantas y la utilización de las relaciones que les brinda su posición social.
Que se abra un debate sobre la línea de sucesión ante el nacimiento de una posible heredera en lugar de un posible heredero
Que nos demos cuenta de que si uno de nuestros hijos menores se pega un tiro en el píe, intervienen los servicios sociales.


Ahora resulta que la Casa Real asesorará a Cristina en la elección de abogado defensor ¿también lo pagará papá a costa del erario público?