Que si Camps con sus trajes de regalo, que si Divar y sus hotelazos en compañía, que si María Antonia Munar con el “caso maquillaje”, y sus
alegres declaraciones posteriores, que si el hijo de Pujol ahora con una trama relativa a
ciertas certificaciones energéticas, que viene a ser como la estafa de las
revisiones de la caldera pero en finolis.
Todos estos están claros, por que han pasado de salir a
pecho descubierto en la prensa a estar imputados y juzgados en algún caso.
Pero vamos con otro tipo de corruptela en la que nadie se
llena el bolsillo con dinero de dudosa procedencia, ni adquiere propiedades
muebles e inmuebles sin gastar un euro. Se trata de otro tipo de corrupción,
menos evidente ya que se trafica con influencia no con bienes, pero igualmente
reprochable para los ¿servidores públicos?, por que ya no quiere nadie ser
confundido con un político:
- Álvaro Ramírez de Haro (por si el apellido no da idea de quien es, se trata del hijo de la condesa de Murillo: Esperanza Aguirre) ha sido recientemente contratado como asesor de gabinete de Secretario de estado de Comercio, puesto habitualmente ocupado por economistas. Pero Álvaro, que antes trabajaba como abogado en el despacho de un gran amigo de la familia, debió pensar en las declaraciones de su mamá relativas a que no consideraba que el “empleo público sea un factor de calidad y estabilidad en el conjunto del empleo" y decidió así a bote pronto, comprobarlo por si mismo, dejando el ámbito privado para caer en el Ministerio de Economía. Que menos mal que ya va advertido por la condesa/lideresa que si le sale mal puede decirle el famoso: ya te lo advertí.
- María Zaplana (este si que nos suena) trabaja como asesora en el gabinete de la Secretaría de Estado de Turismo. Haciendo suya la frase de Maria Dolores de Cospedal “cuándo van a pensar en los que no tienen trabajo y dejar de pensar en sus intereses particulares”, su padre Eduardo Zaplana, ex Ministro de Trabajo, tomó cartas en el asunto para sacar a su descendiente de las listas de INEM y colocarla en el gabinete de la esposa de su gran e íntimo amigo Martinez Pujalte.
- Ignacio López del Hierro (esposo de la mencionada Dolores Cospedal, senadora, presidenta y secretaria general) fue nombrado consejero de Red Electrica Española, empresa controlada por la SEPI, imposible ser una empresa más pública. y decidió dimitir reconociendo que lo hacía para no dañar la imagen de su señora. Así que dos meses después de su sacrificio pudo con gran esfuerzo y dedicación y a base de acudir a duros procesos de selección, conseguir otro empleo en Iberdrola Ingeniería y Construcción, pero esta vez sin remordimientos de conciencia por que Iberdrola sólo está participada por el Estado a través de Bankia y ya estamos un poco cansados del tema rescate bancario.
En las ligas mayores tenemos
jugando a:
- Iván de la Rosa (consorte de la omnipotente y todo poderosa Soraya Saenz de Santamaría) contratado por Telefónica. Que un día se levantó pensando que ya estaba bien de excencia para cuidar a su retoño y ya que su suegra se había instalado en casa, era hora de mejora de empleo. Así pues y tras una cena intima con su mujer y el responsable jurídico del Telefónica, Ramiro Sánchez de Leirín, llegaron a la conclusión de lo beneficiosa que podía ser su colaboración y ya que el marido de Cospedal no quería nada con empresas relacionadas con el Estado, pues que él mismo se sacrificaba y aceptaba el puesto de asesor jurídico internacional. Aunque no esté muy relacionado con la secretaría de Estado y Presupuestos, su anterior puesto, el chico es muy estudioso y se pondra a la altura del cometido en dos patadas.
- Manuel Aznar López (me vuelven a sonar unos apellidos) nombrado por el Senado como consejero del Tribunal de Cuentas. Trabajar de consejero es como si dijéramos: dar tu opinión una vez al mes sobre temas que no conoces muy bien y de los que no te vas a informar, por que total para hablar de ellos un ratillo al mes no merece la pena (obsérvese lo que pasó con los consejeros de Caja Castilla la Mancha poco antes de ser intervenida por el Estado)
Dudo que cualquiera de los y las citados y citadas gozaran de sus actuales puestos de trabajo si sus familiares no tuvieran presencia actual o pasada en algún cargo de gran responsabilidad en el estado central o autonómico. No por que se pueda dudar de sus capacidades puesto que no se han puesto a prueba en ningún momento en el acceso al puesto y por tanto es difícil valorarlas; sino, por que en el mundo real no es posible acceder a procesos de selección para esos puestos que se asignan sin convocatorias de ningún tipo.
Podría dar algunos nombres más, pero….estoy pensando que mejor me voy a repartir algún currículum, que mi familia sólo tiene los contactos que hacemos en la cola del paro y esos no nos dan ni para mamandurrias.
